Durante milenios nos han confundido con sermones, versiculos, sotanas y crucifijos metalicos y cargados de muerte, todo para que nos enfermemos, nos odiemos y sigamos sometidos a la voluntad de un par de Iluminados Ambiciosos.
Llega la hora de aplicar la nueva teologia (aunque la supertición se vista de teologia, supersitición se queda) que nos ayudará a sanar, a amar, a comprender y a ser felices.
Todas las religiones nos deslumbran con ideas sobre lo que hay luego de la muerte y así han hecho dinero, posición y fama aprovechando el miedo y la angustia de miles de deudos, ignorantes y supersiticiosos.
Pero lo que realmente importa es lo que hay antes de la vida
Si antes de nacer, estabamos en un lugar mejor
Nos cagarón, y feo.
No me imagino un pecado lo suficientemente grande y colectivo que amerite un castigo tan colosalmente cruel y descriteriado.
Ademas, es posible encontrar la felicidad en esta tierra, por lo que nuestra vida no puede ser un simple potro de castigo por pecados preterrenales.
No podemos estar aquí solo para sufrir y pedir perdón, no es suficiente, ni logico, ni sano.
Por lo que antes de nacer, debimos estar en un lugar peor.
Es dificil conceptualizar un mundo más desagradable que este, pero de existir, significa que nuestra estancia en la tierra es un milagro, un premio, una evolución.
Tal vez antes de nacer sufriamos, pero alcanzamos un nivel de virtud suficiente como para desligarnos de ese sufrimiento (teorema moralista)
O tal vez nuestra conciencia evolucionó a tal grado que pudimos acceder a otro nivel, donde gozamos de cosas nuevas y nos alejamos de ciertos males. (teorema mistico)
Entonces, estar en esta vida solo tiene un sentido.
Seguir avanzando.